Sobre la revista
Volumen 26, Núm. 115
Comunicación pospandemia
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Razón y Palabra es la primera revista científica web en castellano dedicada a temas de comunicación. Desde 1996 se publica ininterrumpidamente en el ciberespacio. Originalmente fue creada en el ámbito de investigación académica en el Tecnológico de Monterrey, campus Estado de México. Razón y Palabra es un espacio digital plural, integrador, abierto, tolerante, no lucrativo y ajeno a intereses políticos o partidistas de cualquier índole, cuya misión es contribuir a la generación del conocimiento productivo para la comunicología posible. Razón y Palabra es un espacio abierto al encuentro del diálogo productivo del ser y su historia. Indexada en: Latindex Catálogo, WorldCat, Google Académico, C.I.R.C., Dialnet, DOAJ, EBSCO, Redib, Redalyc |
Enfoque y alcance
Revista científica de comunicación, originalmente fue creada en el ámbito de investigación académica en el Tecnológico de Monterrey, campus Estado de México. Actualmente se publica desde el Observatorio de Comunicación (OdeCom) de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador, dentro del sello Editorial Razón y Palabra a cargo del profesor Octavio Islas, Ph.D., fundador del proyecto general., dedicada a los estudios de comunicología. Se publica en forma cuatrimestral. Razón y Palabra es un espacio digital plural, integrador, abierto, tolerante, no lucrativo y ajeno a intereses políticos o partidistas de cualquier índole, cuya misión es contribuir a la generación del conocimiento productivo para la comunicología posible.
Es un proyecto no lucrativo: no paga a los autores, ni cobra por costos de procesamiento de los artículos y tampoco por su publicación.
Proceso de evaluación por pares ciegos
Los artículos que cumplan con los requisitos podrán ser aceptados para continuar con el proceso de revisión. En esta primera fase serán revisados por el Editor de la revista.
Los artículos luego de su revisión serán enviados a doble arbitraje para su valoración respectiva por pares ciegos académicos.
Los miembros del Comité Editorial y de Arbitraje leerán y evaluarán, como pares académicos, los artículos teniendo en cuenta la originalidad del enfoque, el rigor metodológico y científico, la actualidad del tema, la trascendencia de los aportes, además del respeto de las normas académicas de escritura. El Comité Editorial y de Arbitraje podrá recomendar un par académico externo, en relación al tema.
La evaluación de los artículos será confidencial y se expresará en un informe de los pares donde se indicará ya sea, la aceptación, la aceptación condicionada o el rechazo del artículo.
En caso de que el artículo obtenga la aceptación condicionada, el Editor de la revista enviará el informe al autor a fin de que este realice las adecuaciones correspondientes. El autor está en completa libertad de efectuar o no las correcciones. La revista solo publicará los artículos plenamente aceptados.
En caso de controversia, la revista podrá remitir a una nueva evaluación el artículo.
Si el artículo fuera aceptado o rechazado, la revista notificará de este particular a su autor mediante comunicación respectiva.
Las opiniones expresadas por los autores no necesariamente reflejan la postura de los editores de la publicación.
Frecuencia de publicación
Razón y Palabra es una revista que tiene un formato de publicación digital. Su periodicidad es cuatrimestral, con el siguiente ciclo para sus monotemáticos:
Enero - Abril (Publica número Mayo)
Mayo - Agosto (Publica número Septiembre)
Septiembre - Diciembre (Publica Enero siguiente año)
La revista no persigue fines de lucro y más bien se constituye en un espacio para la publicación de artículos de investigación, ensayos reflexivos y reseñas de académicos. Por las contribuciones no hay remuneración alguna.
Los académicos interesados en colaborar deben enviar sus artículos a través de la plataforma. En su defecto, pueden ponerse en contacto con el Director Editorial: Jorge Cruz Silva (jacruz@puce.edu.ec).
Política de acceso abierto
Esta revista proporciona un acceso abierto inmediato a su contenido, basado en el principio de que ofrecer al público un acceso libre a las investigaciones ayuda a un mayor intercambio global de conocimiento.
Objetivo
La revista de Comunicación Razón y Palabra tiene como objetivo general la difusión científica de las investigaciones de la comunidad académica en el contexto de la comunicología. Por tal motivo, NO COBRA por las colaboraciones que son sometidas a la consideración de nuestros consejos editoriales. Más bien, está abierta a la discusión y al avance del conocimiento, en el marco de la defensa de la dignidad del ser humano.
Indicaciones para la revisión
Los artículos deberán ser escritos considerando las normas señaladas por Razón y Palabra; ser enviados, previo registro del autor*, mediante la pestaña de Envíos, en formato Word o de Open Office con las extensiones .doc, .docx, .rtf.
* Debido a cuestiones de seguridad, en primera instancia, el autor solo podrá registrarse como lector, por lo que no podrá adjuntar ningún archivo. Una vez registrado como lector, debe enviar un correo al Administrador de Razón y Palabra, para que cambie el usuario a autor y así continuar con el proceso de envío.
Declaración de ética y buenas practicas
Razón y Palabra está comprometida con altos estándares de ética y toma las medidas posibles para evitar el fraude y el plagio. Todos los autores deben someter manuscritos originales, inéditos y de su autoría declarando dichas características al momento de someter sus trabajos para consideración del comité editorial. Así mismo la revista está comprometida en garantizar una justa y objetiva revisión de los manuscritos para lo cual utiliza el sistema de evaluación de doble ciego.
Declaración de buenas prácticas editoriales y normas éticas
Los autores que presenten sus artículos deben cumplir con las prácticas en ética de la publicación específicamente con respecto a la autoría, el plagio de artículos publicados, la manipulación de las datos, transparencia en el proceso de publicación, esgrimir los conflictos de intereses y seguir las políticas de investigación ética de acuerdo con el Comité de Ética en Publicación (COPE): http://publicationethics.org/ Razón y Palabra hace uso del Digital Object Identifier(DOI) para la identificación y ubicación de sus artículos.
Los días y los años
Razón y Palabra es la primera revista web en castellano, dedicada a temas de comunicación, y desde 1996 se publica ininterrumpidamente en el ciberespacio.
La iniciativa fue de Alicia Ramírez. Así, un grupo de académicos e investigadores del PROYECTO INTERNET del Tecnológico de Monterrey, campus Estado de México (Octavio Islas, Fernando Gutiérrez, Carlos de la Guardia, Jaime Limón y Alicia Ramírez) decidieron incursionar en el ciberespacio y publicar la primera revista web en castellano dedicada a temas de comunicación.
Alicia Ramírez realizó el primer sitio web de Razón y Palabra y fue la primera directora. En la dirección de la revista, le sucedieron varios alumnos y profesores del Tecnológico de Monterrey, campus Estado de México, como Eduardo Scheffler, Alejandro Carranco. Alejandro Ocampo Almazán y Mauricio Huitrón realizaron un trabajo particularmente fecundo.
En 2015, Octavio Islas migró a Quito, Ecuador y radicó la revista en esta ciudad. Desde 2019, Razón y Palabra tiene su base en la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE). Marco López Paredes es el Editor General de la revista.
Con el paso de los años, Razón y Palabra se ha convertido en uno de los acervos más importantes en el estudio de la comunicología posible en Iberoamérica.
Razón y Palabra es un espacio digital plural, integrador, abierto, tolerante, no lucrativo y ajeno a intereses políticos o partidistas de cualquier índole, cuya misión es contribuir a la generación del conocimiento productivo para la comunicología posible.
Filosofía de Razón y Palabra
Estas líneas responden a la necesidad de explicar por qué adoptamos el nombre de Razón y Palabra para nuestra revista científica.
En el libro Metafísica de la Expresión, para afirmar que el hombre es “el ser del logos”, Eduardo Nicol nos remitió a Platón, quien en su diálogo “El Banquete” reitera el profundo simbolismo que contiene el bello mito filosófico de Empédocles acerca de los orígenes del mundo y de la vida.
En su relato, Empédocles refiere la existencia de unos primitivos seres, en quienes extrañamente se mezclaban la naturaleza varonil y la femenina. Podría suponerse que esos seres resultarían más completos y autosuficientes que los humanos. Sin embargo, su terrible fatalidad radicaba en que eran completamente estériles. Por tal motivo, pronto desaparecieron de la faz de la Tierra.
Posteriormente –prosigue Empédocles– surgieron nuevos seres, los cuales ya estaban claramente diferenciados como varón o hembra; es decir, definidos por la misma carencia del ser ajeno. En ellos –relata el filósofo– ardería intensamente el fuego del deseo, porque el fuego mismo expresaba el ferviente anhelo de unirse nuevamente a su semejante.
En “El Banquete”, Platón profundiza en el amplio simbolismo de este mito filosófico a través del discurso de Aristófanes. Eduardo Nicol precisamente acude a ese mito para reflexionar sobre la trascendencia de nuestras acciones comunicativas y concluir que el hombre es el ser del logos:
La humanidad primitiva era también cabal en su dualidad: cada ser tenía dos caras en una misma cabeza, cuatro manos y otras tantas piernas, cuatro orejas y dos sexos (...) Su fuerza y su vigor eran tan prodigiosos que ambicionaron escalar el cielo e invadir la morada de los dioses. Mal podrían éstos consentirlo, pero tampoco querían deshacerse de los hombres y aniquilarlos, privándose entonces de los honores y ofrendas que de ellos recibían. Necesitados, pues, de los mortales, pero temerosos de su pujanza, Zeus y los demás dioses deliberaron y luego acordaron cortarlos por la mitad, duplicando su número de esta manera, a la vez que le restaban a cada uno la mitad de su poder. Este corte, originario de la condición humana actual, desdobló la naturaleza del ser primitivo, y dejó a cada hombre con la oscura convicción de que el suyo no era más que medio ser, y con el anhelo de reunirse con la otra mitad, que lo complementaría de nuevo. El ser humano tiene, pues, el afán constitutivo de formar un solo ser, entero y cabal, con el ser ajeno. Por esto, el amor de unos por otros está implantado en el ser mismo de los hombres. El amor sería como la expresión de una insuficiencia metafísica. Pero más agudamente todavía, la expresión misma sería consecuencia de esa mermada condición ontológica del hombre. El amor se lograría en plenitud, y con él se lograría la plenitud del ser propio, mediante la reunión cumplida con el ser del otro. Pero este amor puede aspirar a la comunión porque el otro no es un ser ajeno, en el sentido de ontológicamente extraño al propio: con dos partes disímiles no puede recomponerse una unidad. El otro es un ser al que llamamos prójimo, o semejante, porque su ser no es tan ajeno que no pueda apropiarse: tiene constitutivamente la disposición de ser parte del ser propio. Y esta disposición radical es la que determina la expresión. La palabra es el nexo de vinculación y de restablecimiento de la "unidad primitiva", como se llamaba el mito, o sea el modo de lograr la plenitud ontológica (Nicol, 1989, pp. 17-18).
De lo anterior, podría concluirse que el hombre es un ser ontológicamente insuficiente; como tal, desea reunirse consigo mismo, para completarse, y sólo puede completarse con el otro, que le es propio y ajeno a la vez.
Por su misma insuficiencia ontológica, el hombre se ve en la necesidad de intentar trascender, saliendo de los estrechos límites que le reserva su mismidad. Para poder emprender la búsqueda de la otredad, el hombre expresa. Es la misma dialéctica del ser la que determina la dialéctica de la expresión.
Para Platón, el hombre es un ser simbólico, el hombre es el ser del sentido. Esto quiere decir que, para el hombre, la expresión es ser en acto, es realizar la potencia propia del ser. De ese modo, Nicol, a partir de Platón propone que la comunicación solo es posible desde el mismo ser: "el ser del hombre se hace patente de manera directa e inequívoca en la expresión humana" (Nicol, 1984, p. 41). De esa manera, mientras que las teorías de la comunicación intersubjetiva ubican la relación entre un yo y el otro yo desde la óptica de una relación mediata, Nicol en cambio afirma que la expresión no es "mediadora", sino inmediatamente comunicadora del ser.
El hombre es el ser del logos. Logos –nos explica Nicol– es razón y palabra: "estas dos acepciones del término son complementarias o recíprocas, como el anverso y el reverso de una moneda, y no debieron nunca desprenderse la una de la otra". (Nicol, 1984, p. 61)
La palabra es nuestro profundo nexo de comunidad ontológica. La acción comunicación revela al ser. La comunicación implica en sí misma la participación activa y productiva del ser. La palabra no es tan solo el ser en acto del ente particular que lo expresa; es una forma de actualidad del ser en general. Por tanto, el ser se presenta a sí mismo en la relación dialógica que entraña la acción comunicativa. La relación dialógica, sin embargo es dialéctica. El ser de la expresión es un ser histórico.
Razón y Palabra es un espacio abierto al encuentro del diálogo productivo del ser y su historia.
Referencias
Nicol, E. (1984). Los principios de la ciencia. México: FCE.
Nicol, E. (1989). Metafísica de la expresión. México: FCE.
Platón: “El banquete o de la erótica”, en Diálogos. México. Editorial Porrúa, Col. Sepan Cuantos. Nº 13.